IMX-500: el sensor de imagen con Inteligencia Artificial que cambiará las reglas del juego
Con el tiempo, todas las tecnologías reducen su tamaño y se vuelven más eficientes. Hay mil ejemplos de ello, comenzando por los teléfonos móviles, que han llegado a ser más potentes que muchos de los ordenadores que hay en el mercado. Pues bien, la noticia es que Sony ha inventado un sensor de imagen programable con la Inteligencia Artificial que desee el cliente. Nos explicamos.
Todas las cámaras de foto y vídeo incorporan, como elemento principal, un sensor de luz dividido en millones de píxeles, que seencargará de transmitir esta información cruda al procesador, que será el que convertirá esos datos en una imagen compuesta. El sensor sería como un ojo que se limita a recoger lo que ve para transmitirlo al cerebro, donde se entenderá y se procesará lo que se está viendo. Pero... ¿y si el mismo ojo ya fuera capaz de entender lo que está viendo? Quizá nos ayudaría a tener una vida más feliz pero también más sesgada, ya que podría actuar de filtro de la realidad para que nuestro cerebro solo recibiera imágenes agradables. Sería como una versión en tiempo real de lo que llamamos memoria selectiva.
Lo que parece un capítulo de Black mirror, Sony lo ha convertido en una realidad, al menos en el àmbito de la tecnología. El sensor IMX-500lleva acoplado una lámina integrada que es capaz de procesar y entender directamente las imágenes que está captando, lo cual cambia completamente las reglas del juego ya que tumba de un plumazo la necesidad de tener siempre un servidor en la nube disponible para procesar la información. Además, no dependería tanto de las condiciones de congestión de la red para enviar esas imágenes y recibir la orden que procediera, ya que la interpretación de la información y la toma de decisiones se lleva a cabo directamente en el sensor.
Como funciona
La placa que incorpora el sensor dispone de una memoria propia donde se almacena el paquete de Inteligencia Artificial que sea necesario, en función del uso que se le vaya a dar a la cámara. Este contenido puede reprogramarseen función de los intereses del usuario,y será la cámara directamente la que tome las decisiones sobre qué acción ejecutar, en lugar de dejar esa tarea al servidor de turno.
Uno de los ejemplos prácticos más claros es el de Roma, donde ya ha entradoen funcionamiento una red de cámaras equipadascon el IMX 500 para detectar las condiciones del tráfico, incidencias, plazas de aparcamiento disponibles en la vía pública e incluso la afluencia de peatones en los pasos de zebra para avisar a los conductores. La implantación de la red de sensores aliviará el tráfico del centro, donde un buen número de los vehículos en circulación son coches dando vueltas en busca de un lugar para aparcar.
La red de cámaras con sensor IMX 500 en Roma. (Sony)
La privacidad es otro de los puntos fuertes de los nuevos sensores. Dado que las cámaras no necesitan enviar las imágenes a ningún centro de datos, en ningún momento graban nada ni almacenan fotos ni videos, si el usuario así lo decide. Simplemente se quedan con la información extraída y actúan en consecuencia, en función de la tarea que tengan asignada.
Más ejemplos prácticos
Otros ejemplos prácticos serían la instalación de estos sensores en los pasillos de supermercadospara controlar las existencias de los productos a la venta, para elaborar mapas de calor y saber qué áreas son las más frecuentadas, o incluso en el área de caja, para detectar los productos que se compran sin tener que escanearnada.
Detección de objetos en un supermercado.(Sony)
También serán una revolución en el ámbito de la grabación de vídeo, para perfeccionar el autoenfoque. Al reconocer qué objetos tiene delante, la cámara centrará el punto de atención en el sujeto principal de la imagen, aunque haya más elementos que puedan distraer al autofocus, con lo cual se obtendrán grabaciones siempre enfocadas en lo que interesa.
En automovilística, servirán para perfeccionar los sistemas de seguridad, tanto del vehículo hacia afuera (en la identificación de posibles obstáculos y peatones cercanos) como de puertas para adentro, detectando si el conductor se distrae o se adormece.
Por último, las empresas podrán tener un supervisor virtual que reciba información sobre los movimientos y acciones de lostrabajadores, tal como puede comprobarse en este vídeo:
El abanico de posibilidades es infinito, en este primer paso para reducir las estructuras de Inteligencia Artificial a la mínima expresión y extender su implementación a todos los ámbitos posibles de la vida cotidiana.